Israel Santacruz: La Ruta Quetzal

Pooor fiiiinnnn, ya ya ya, no desesperen, lo prometido es deuda, y yo pago mis deudas. Así que ahora podrán disfrutar de mis crónicas de la:
Ruta Quetzal

Hace dos semanas llegaron a Pátzcuaro 326 jóvenes de 55 países diferentes. ¿El motivo?, La Ruta Quetzal. Para quien no lo conoce, es mi sueño hecho realidad; y se los contaré.

Hace muchos muchos años atrás (a finales de los 50's) un hombre llamado Miguel de la Cuadra era campeón en jabalina en España, por lo que participaría en las Olimpiadas de no se que país, pero por problemas políticos y sociales no pudo participar. Descepcionado, hizo lo que muchos hombres hacemos cuando nos han golpeado donde más nos duele y sentimos que el mundo al que llamamos "civilizado" no tiene cabida en nuestra vida: emprendió un viaje.

Fue así como Miguel de la Cuadra, con mochila al hombro, viajó por todo América Latina, pasando penurias y aventuras que sólo un viajero puede comprender. Así llego al Amazonas, en el corazón de Brasil, en donde conoció a las tribus que ahí habitaban. Esas tribus cazaban con lazas, y Miguel de la Cuadra, campeón de jabalina, les ayudaba, ganándose la confianza de los indígenas brasileños. De esta forma duró tres años viviendo con ellos, para seguir viajando por América.

Años después volvió a España como todo un aventurero, con su porte de conquistador a la época de Cortés, pero no sin afán de robar a las tribus americanas. Llegó con un muy buen amigo suyo, el Rey de España no se que fregados, a quien le propuso crear una fundación para que los jóvenes españoles y de los países que se relacionen política, social, o culturalmente con España pudieran viajar por el mundo. Y fue así como en 1979 nació la Ruta Quetzal.

Cada año se realiza el viaje por diversas latitudes, siempre con una temática. Este año fue La Nao de China en México (o sease una embarcación donde inició el comercio en México). Los jóvenes durarían 3 semanas en México, por esos estados donde cruzó el comercio desembarcado de La Nao de China, y otras 3 semanas en España. Los chavos que participan son forzosamente de 16 y 17 años (aquí fue donde se frustró mi sueño, pues tengo que esperar otros 2 años para poder participar, jajajaja).

Así, la Ruta les proporciona todo, y en verdad digo TODO: ropa, mochilas, gorras, botas, cantinflora, cubiertos, plato y vaso, casa de campaña, bolsa de dormir, transportación de ciudad a ciudad, en fin, todo lo que necesitan para sobrevivir. Y como todo aventurero, don Miguel de la Cuadra aún los acompaña, a pesar de sus 73 años y de que el año pasado (en una de sus aventuras), cayó de 15 metros de altura al colgar de un helicóptero en movimiento.

Cuando supe toda esta historia, me quedé completamente fascinado por la Ruta Quetzal, e inmediatamente me hice buen amigo de la jefa de prensa, Rocio, así como platiqué con Don Miguel, como lo llaman todos (y quien según me dicen, es uno de los personajes más conocidos de todo España).

Obviamente uno de los principales atractivos de la Ruta son las chamacas, que aunque pequeñas, vean nomás que chulada. De donde las prefieren, ¿México, Argentina, Brasil?, bah, no se se pongan tristes si se las ganan, también hay españolas, francesas, italianas. Aaah, ¿¿no les gusta lo europeo tradicional ??, no importa, pueden elegir una holandesa, una pelirroja de Estonia, o si ya es mucho su fanatismo pues a la chinita o a la coreana.

Hay todo un campamento para elegir. De hecho, cuando llegué al campamento, me di cuenta que estaba en un lugar mágico. Ahí había un sinnúmero de árboles frutales, y también todo un campamento de jovencitas exploradoras.....