Un sueño bastante real

Anoche me dormi con uno que otro pensamiento en mi cabeza , por lo que cuando desperté y recordé mi sueño no fue muy raro lo que en sueños observé. Cuando dormí estaba yo en la ciudad, pero en un sitio que se veía bastante lúgubre y oscuro y de pronto vi a una chica en una estética.

Esta chida comenzó a seducirme y recuerdo que yo respondí a ello, respondí con tal seguridad que bueno, salimos de donde ella estaba e ibamos de la mano, y de pronto estaba yo con una ropa distinta, con un traje o ropa diferente, y me encontraba de pronto de tranquilo a un poco alterado

Inicialmente comencé a esconderme por algunos callejones totalmente oscuros, pues sabía que algo me perseguía, y sabía yo que era un monstruo que no buscaba a nadie mas que a mi. Recuerdo que huía y me escondía de ese monstruo, y aunque algo en mi sabía que esa cosa no podía matarme, sí podría lastimarme. De pronto vi que ese monstruo apareció frente a mi en uno de los callejones y sólo un poco de luz dejaba ver una parte de su rostro, era horrible, con enormes colmillos y ojos colos plata que reflejaban la poca luz.

El monstruo rugió y corrió hacia mi, por lo que huí, pero esa cosa era mucho más rápido que yo. No tardó en darme alcance, y de pronto me vi corriendo acompañado, pues parece que en mi búsqueda el monstruo encontró a alguien y lo atacó severamente y yo lo rescate. Cabe decir que no era la chica (que era bastaaaante atractivaaa) sino un hombre, pero no lo recuerdo o al menos no que yo lo conozca.

De pronto lance a este hombre lejos, lo lance con una fuerza sobrehumana, pero en ese momento el monstruo se avalanzó sobre mi y rugió con mayor fuerza que antes, su rugido se escuchó por doquier y me golpeaba severamente. Recuerdo que yo luchaba contra él pero era mucho más fuerte, y parecía sentir mucho coraje hacia mi, pero en exceso, y me azotaba al grado de lastimarme mucho. Pero de cierta forma sabía que no me lastimaría hasta matarme, pues no se porqué pero de cierta forma sabía que simplemente no podía hacerlo.

Sin embargo, aún y cuando sabía que no podía matarme, yo también sabía que esa cosa me tenía dominado y no podía quitarmelo de encima y de cierta forma me había vencido, aún y cuando yo no había muerto.

Cuando desperté aún temblaba, y voltee a mi alrededor buscando al monstruo. Lo curioso es que yo bien sé qué representa ese sueño, no tuve que pensar mucho o decir "que extraño sueño", porque se perfectamente lo que significa.